Un nuevo estudio sugiere que la minería de bitcoin podría ayudar a impulsar la transición a fuentes de energía renovables. Los investigadores Juan Ignacio Ibañez y Alexander Freier argumentan que la demanda de electricidad barata de los mineros de Bitcoin proporciona incentivos para una mayor producción de energía renovable. Sin embargo, para que la minería desempeñe este papel de descarbonización, la industria debe adaptarse.
Los investigadores revelan que la minería de Bitcoin podría ser un catalizador potencial para el crecimiento de las energías renovables
El proceso de prueba de trabajo (PoW) que consume mucha energía y que sustenta a Bitcoin ha enfrentado críticas por el alto uso de electricidad y las emisiones de carbono. Sin embargo, el análisis de investigación de Ibañez y Freier indica que la sed de energía económica de la red puede atraer a los mineros hacia fuentes renovables como la solar y la eólica. Este flujo de ingresos adicional podría ayudar a la rentabilidad de las energías renovables e incentivar la expansión de la capacidad.
“Hay razones para ver Bitcoin para la descarbonización de manera positiva: no solo necesita un apoyo político mínimo para implementarse, sino que también las ventajas de la minería de bitcoin (interrupción, flexibilidad, portabilidad, etc.) son fortalezas técnicas intrínsecas, mientras que los desafíos son principalmente el resultado de factores económicos y circunstancias técnicas contingentes”, explica el autor.
Efectivamente, la minería de BTC actuaría como un «recurso de carga flexible», absorbiendo el exceso de suministro renovable que, de lo contrario, se desperdiciaría. La movilidad y la interrumpibilidad de la industria minera la hacen adecuada para brindar servicios de estabilidad de la red. Al suavizar los desequilibrios entre la generación renovable fluctuante y la demanda variable, la minería puede facilitar una mayor penetración renovable.
Sin embargo, para que la minería impulse la descarbonización, se requieren adaptaciones. Los investigadores señalan que la minería debe evitar exacerbar la demanda máxima de la red y utilizar solo el exceso de suministro renovable. Con operaciones basadas predominantemente en energías renovables optimizadas para las condiciones de la red, la red de Bitcoin podría producir un impacto de descarbonización de la red, detalla el análisis de Ibañez y Freier.
No obstante, los autores dicen que persisten las incertidumbres con respecto a los plazos y la viabilidad de una minería totalmente neutra en carbono. El estudio de Ibañez y Freier destaca que la reacción y las regulaciones públicas también podrían amenazar el crecimiento de la industria. Aún así, Ibañez y Freier argumentan que Bitcoin tiene fortalezas técnicas únicas que justifican una mayor investigación sobre su posible papel ambiental , en lugar de un rechazo total.
“Dentro del campo más amplio de la investigación de Bitcoin, este estudio posiciona el consumo de energía y el potencial de descarbonización de la minería de bitcoin como un área de investigación importante y consecuente”, insiste el estudio. “Dados los atributos únicos y los posibles impactos de la minería de Bitcoin en las redes de energía y el cambio climático, estamos convencidos de que este problema representa una de las direcciones de investigación futuras más importantes en el ámbito de los estudios de Bitcoin”, concluye el estudio.