El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó su intención de impulsar una legislación sobre stablecoins antes del receso legislativo de agosto, en un esfuerzo por establecer un marco regulatorio para las criptomonedas y garantizar el dominio del dólar digital.
El anuncio se dio en el marco de la primera Cumbre de criptomonedas de la Casa Blanca, que reunió a ejecutivos de alto nivel del sector, reguladores y legisladores clave, según recogió el medio de noticias The Block.
En el evento, Trump expresó su respaldo a los proyectos de ley en curso sobre stablecoins y estructura de mercado, enfatizando su compromiso con la competitividad estadounidense en el sector de los activos digitales. “Espero que los legisladores me envíen esa legislación antes del receso de agosto, si pueden“, afirmó el mandatario.
La cumbre del viernes reunió a una larga lista de líderes de la industria de criptomonedas —entre los que se incluyeron altos ejecutivos de Coinbase, Ripple, Kraken, Gemini, Chainlink y Robinhood— para ofrecer sus puntos de vista sobre las futuras políticas en una mesa redonda junto a altos funcionarios de la administración de Trump.
Trump habla sobre la reserva estratégica Bitcoin
Previo a la cumbre, Trump firmó una orden ejecutiva que establece una reserva estratégica de Bitcoin, la cual estará compuesta por criptomonedas incautadas en procesos judiciales y administrada por el Departamento del Tesoro. También se creó un “stock digital” con otros activos digitales confiscados, los cuales podrían ser convertidos en bitcoin a largo plazo.
Además de elogiar los esfuerzos los legisladores, Trump discutió su nueva reserva de Bitcoin. Según la cobertura de CoinDesk, el presidente se lamentó de que el gobierno federal ya hubiera vendido gran parte de su Bitcoin incautado.
“El gobierno federal ya se encuentra entre los mayores tenedores de Bitcoin, como saben, realmente uno de los mayores tenedores del mundo, con hasta 200.000 BTC obtenidos a través del derecho civil y varias otras formas de ley, incluidas las acciones de cumplimiento“, dijo. “Estas explotaciones existentes formarán la base de la nueva reserva“.
Continuó proclamando que, a partir de ahora, los Estados Unidos seguirá la máxima de todo bitcoiner: “Nunca venda su Bitcoin“.
Fin de la “desbancarización” a empresas cripto
Uno de los puntos posiblemente más destacados de la cumbre fue la denuncia de Trump contra la práctica de “desbancarización” o bloqueo por parte de los bancos a las empresas de criptomonedas. El presidente dijo al respecto que pondría fin a la “guerra de su predecesor contra las criptomonedas”, insinuando que este fenómeno fue incentivado por la administración anterior de Joe Biden.
Según informes, Trump hizo un llamado al fin a la “Operación Choke Point 2.0”, un término utilizado por la comunidad de criptomonedas para describir el intento coordinado de varias agencias federales para limitar la actividad cripto de los bancos.
“Forzaron a los bancos a cerrar cuentas de empresas cripto y usaron al gobierno como un arma contra toda la industria“, declaró Trump, asegurando que su administración pondrá fin a estas restricciones y garantizará el acceso financiero al sector.
Después de las declaraciones del mandatario, la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC) de los Estados Unidos —que supervisa y regula a los bancos del país— emitió una carta que establece que los bancos estadounidenses regulados por el gobierno federal ahora puedan comprometerse en actividades de criptomonedas, dando así un giro a su postura hostil anterior.
Un cambio de rumbo en la política cripto de EE. UU.
Un portavoz de la Casa Blanca había rechazado horas antes del evento, los rumores de que los asuntos fiscales podrían plantearse en la cumbre, adelantando que el foco central de la reunión era reiterar la intención de Trump de revertir las políticas de Biden.
Si bien el giro de Trump respecto a las criptomonedas marca un fuerte contraste con el enfoque regulador de la administración anterior, algunos expertos advierten que aún queda trabajo por hacer para establecer un marco regulatorio claro y evitar riesgos sistémicos.
Jennifer Schulp, del Cato Institute, señaló, según la cobertura, que “aunque el trabajo ha comenzado bien, se necesita un esfuerzo sostenido para garantizar que la industria cripto pueda competir en igualdad de condiciones“.
Con estas iniciativas, Trump busca posicionar a EE.UU. como un líder en el sector de activos digitales, aunque el éxito de su estrategia dependerá de la rapidez con la que el Congreso avance en la regulación de las stablecoins y la estructura del mercado cripto.
